Es un trabajo duro, pero muy gratificante. Jornadas enteras para cosechar las plantas de agave que sirven de base para la fabricación de tequila. Ser jimador es un estilo de vida, un trabajo antiquísimo que se hereda de padres a hijos, sin el cual no podríamos disfrutar de la bebida mexicana por excelencia. ¿Conoces cómo trabaja y vive un auténtico jimador? ¡Atención!
Aún no han salido los primeros rayos del sol y el jimador se encuentra ya trabajando en los coloridos y bonitos campos del agave. Trabaja bajo los incansables rayos del sol hasta la tarde para recoger el agave maduro, aquel que ya lleva plantado entre 8 y 12 años. La coa de jima es su principal compañera de trabajo (aunque también se suelen usar otros tipos de herramientas) con la que se ayuda a recoger el agave de una forma rápida pero cuidada, el tiempo y las temperaturas apremian. Una herramienta utilizada ya por los indígenas y utilizada desde hace más de cinco siglos.
Las herramientas imprescindibles
La coa para jimar es como un cuchillo de hoja plana en el extremo de un poste, como si fuera una azada común y corriente. Con ella el jimador cada día elimina primero la flor del agave, la que provoca que la piña central se hinche. Después ésta se cosecha y con la coa se cortan las hojas exteriores de la planta dejando solo entero el centro pulposo que se corta y se cuece para preparar el tequila.
Otras herramientas son el barretón que es utilizado para la extracción y sembrado de hijuelos; el machete largo para realizar el barbeo del agave y el cuernito, elaborado en piel de toro y relleno de una crema especial elaborada por el mismo jimador y que se utiliza para suavizar sus manos del gran esfuerzo que realizan al utilizar los instrumentos e indispensable para los dolores de hueso, para cortes y suavizar la piel.
Profesionales compañeros del jimador
A su lado en el campo del agave se encuentra el jornalero que se dedica a varias actividades como el arranque de hijuelos, la plantación de éstos, aplicar productos agroquímicos como fertilizante, cal, yeso… al final de la jornada el número de piñas jimadas puede llegar alcanzar las 350 por persona, dependiendo de la experiencia de cada uno. A la par de la jima, existe la actividad del barbeo. Esta consiste en despuntar las hojas de agave para permitir una mayor concentración de azúcar en la piña, cada día cada jimador puede barbear aproximadamente 3.000 plantas de agave. Conoce esta experiencia en Fábrica la Rojeña y José Cuervo Express.
También cabe destacar otra figura importante en los campos de agave, la mujer encargada de recolectar los hijuelos en canastas, así como realizar la selección y separación de los hijuelos para los nuevos campos de agave. También son las responsables del cuidado del invernadero de hijuelos para ser plantados. Todos ellos trabajan con pasión y compromiso que heredan de sus padres y abuelos para producir el mejor Tequila del mundo, Jose Cuervo. Ven y junto con nosotros vive de una tradición milenaria que Mundo Cuervo tiene para ti.